Para tener una verdadera convivencia en la comunidad, es indispensable que todos sus miembros cultivemos y practiquemos los siguientes valores:
Excelencia: Se resalta la calidad del estudiante en merecedor de un reconocimiento, teniendo en cuenta su rendimiento académico, el esfuerzo, el compromiso y el deseo de superación personal.
Trabajo: el educando desarrolla de manera integral todas sus capacidades para realizarse como persona, ser cada día más feliz y útil a la sociedad.
Disciplina: Se promueven estrategias asociadas a la capacidad para llevar una vida ordenada, acorde a nuestros principios, deberes, objetivos y necesidades conforme al cumplimiento de las normas establecidas institucionalmente.
Esfuerzo: mediante la motivación se busca lograr un fin que se persigue, pese a las dificultades que se encuentran en el camino fortalecidos a través del trabajo y lucha continua.